Resulta sabroso y muy sencillo de preparar.
Cantidad: 2
INGREDIENTES
5 huevos
1 y ½ tazas de azúcar (300 gramos)
2 cucharadas de miel
190 gramos de mantequilla a punto pomada
150 cc de crema de leche (nata)
50 gramos de levadura fresca o 2 cucharadas de levadura seca
800 gramos de harina 000 o la que puedas conseguir (7 tazas y 2 cucharadas más)
Pizca de sal
1 y ½ taza de espumante (Sidra, champagne, Moscato o simplemente agua con gas)
1 copa de licor de naranja
150 gramos de chips de chocolate
1 taza de nueces picadas (100 gramos)
400 gramos de fruta abrillantada (glaseada) picada
200 gramos de quinotos picados
50 gramos de pasas de uva
50 ciruelas pasas sin carozos
Para decorar
1 taza de azúcar impalpable (glas, pulverizada)
Gotas de licor
Moras y frutillas (fresas)
PREPARACIÓN
Poner en el vaso de la licuadora, los huevos, el azúcar, la miel, la mantequilla, la levadura, el espumante y el licor.
Licuar todo hasta integrar todos los ingredientes.
Pasar esta preparación a un recipiente grande.
Tamizar la harina junto con la sal e ir agregando a la preparación anterior de a poco y siempre revolviendo hasta lograr una consistencia un poco más espesa que una torta.
Agregar los chips de chocolate mezclando bien.
Incorporar al resto de la fruta 2 cucharadas de harina mezclando bien.
Añadir a la masa la fruta revolviendo bien hasta distribuir la fruta pareja.
Enmantecar y enharinar bien dos moldes circulares de 20×15.
Forrar el fondo del molde con papel aluminio o papel blanco.
Volcar la masa del pan dulce en los dos moldes hasta la ¾ parte del molde.
Dejar en un lugar cálido aproximadamente 1 hora para que la masa se relaje y leve.
Precalentar el horno a temperatura caliente 200º y cocinar los panes dulces 10 minutos en horno caliente.
Bajar a 180º y continuar hasta que esté cocido.
Dependiendo de cada horno puede demorar la cocción 50 minutos más.
Para saber si está cocido, hundir la punta de un cuchillo en el centro y si ésta sale sin nada adherido está pronto.
Esperar que enfríe un poco y desmoldar.
Para decorarlo conviene esperar a que esté frío.
Poner el azúcar en una taza y agregar de a cucharaditas licor (cualquiera de tu preferencia, o jugo de naranja, o jugo de limón o agua).
Se va agregando el líquido muy de a poco y siempre revolviendo hasta que se forme una consistencia cremosa que permita bañar sin dificultad el pan dulce.
Terminar de decorar con frutas frescas, moras, arándanos y frutillas.
O a gusto de cada uno.