La leche de almendras, no es solo un alimento de moda. Desde hace cientos de años es un producto muy utilizado. Su uso se remonta al siglo XIII, en un libro de cocina iraquí, donde se explica como se hace. También se usaba como una alternativa a la leche de vaca en época de cuaresma, cuando se prohibía el consumo de productos de origen animalEn la actualidad, es demandada como alternativa a la leche sin lactosa para los intolerantes, y por eso se está convirtiendo en un producto muy comercial. Si la hacemos en casa aún es más sana, libre de aditivos y de azúcares añadidos. Hoy Julia nos deja la receta básica, compuesta por solo dos ingredientes, almendras crudas, no valen las tostadas, y agua, pero si queréis podéis añadirle edulcorantes naturales como los dátiles, o aromas naturales como la canela o la vainilla.