Antiguamente no existían las cocinas con horno, por lo tanto se empleaban mucho las preparaciones dulces fritas. Uno de los lugares que más se elaboraban es en las distintas regiones de Nápole. Aún hoy mantienen su tradición y realizan estos dulces en fechas ya típicas para ellos, principalmente en vísperas de las Fiestas ya que la gran mayoría de los postres siguen siendo fritos. Un ejemplo de ello son los turdilli, de la región de Campora San Giovanni (Campura San Giuvanni o Campura Santu Janni, en la escritura antigua en dialecto camporés) es una región italiana que pertenece al municipio de Amantea en la provincia de Cosenza, en el límite con la provincia de Catanzaro en la región de Calabria. Tiene tan solo 7.340 habitantes. Nosotros los hicimos con forma de ñoquis, pero pueden encontrarse con otra formas.
INGREDIENTES
3 tazas de harina (360gramos)
1/2 taza de aceite (125cc.)
1/4 taza de Oporto (o licor de anís,o vino blanco etc.)
1 cucharadita de canela molida
1 pizca de nuez moscada
Vainilla
Pizca de sal
Aceite para freír cantidad necesaria
Para bañarlas
500gramos de miel
1 cucharada de esencia de vanilla
PREPARACION
Tamizar la harina, la canela, la nuez moscada y la sal.
Colocarla en un recipiente y hacer un hoyo en el centro.
Agregar el aceite y la bebida elegida. Mezclar y trabajar un poco hasta que la masa no se pegue.
Dividir la masa en trozos.
Tomar uno de los trozos de masa y hacerlos rodar por la mesa hasta formar un cilindro.
Cortar en porciones como si fuesen ñoquis.
Poner abundante aceite en una cacerola chica y de bordes altos.
Dejar que se caliente (sin que llegue a hervir), pues el aceite se quemaría.
Ir cocinando de a poca cantidad por vez.
Una vez dorados, retirar y apoyar sobre papel absorbente.
Para bañarlos. Poner la miel en una cacerola chica y llevarla a fuego suave y dejar hasta que la miel hierva.
Agregarle la vainilla e ir pasando los turdilli ya dorados por la miel.
Se acomodan en una fuente.