Daremos a continuación la técnica para preparar un buen licor ya que puede también transformarse en una industria casera y un medio de vida.
Primero, respetando las reglas cada uno puede elaborar su propio licor. Para experimentar debemos utilizar cierta lógica en la combinación de gustos.
Tipo de alcohol
Se puede emplear tanto el alcohol etílico como el licor de cereales indistintamente. El alcohol de cereales tiene apenas dos o tres graduaciones menos y es más suave su aroma. Oscilan entre 90º y 93º.
Incorporar hierbas
También debemos ser un poco audaces y lanzarnos a la preparación de licores que resulten originales y a la vez beneficiosos para nuestro organismo siempre que se beban con mucha prudencia ya que tienen una alta graduación alcohólica.
El atrevernos a combinar hierbas por ejemplo es un reto interesante ya que se transforman en una bebida digestiva.
Los licores con hierbas son digestivos, por ejemplo cedrón, menta, toronjil, manzanilla etc.
Tomarlos fríos
Los licores quedan mejor fríos de heladera.
Se sirven con hielo. Pueden ser secos y digestivos o dulces y cremosos.
Al servirlos siempre se deben agitar. Al agitarlos el licor se adhiere o napa la botella.
Cuando se agrega licor a un helado actúa como anticristalizante y en preparaciones dulces como conservante.
Otras combinaciones
Se pueden preparar varias mezclas de licores, con fruta, hierbas, dulces, chocolate etc. y se dejan macerar en el alcohol los días que sean necesarios. Luego se pueden terminar con el almíbar o bien si no tenemos tiempo mantener esa esencia bien cerrada y dejarla para terminar de preparar otro día.
Conservación
El extracto puede durar años así, sin que se afecte.
El almíbar se debe dejar hervir 5 o 10 minutos no más y no se revuelve jamás. Llega a 110 o 112º. Se hace a fuego fuerte el día antes y se pone en la heladera y se agrega al extracto así frío.
En este almíbar no se puede hablar de punto, ya que toma una consistencia de gel y al mojarse los dedos con el almíbar se siente una textura parecida al gel.
Son prácticamente interminables, hasta 15 años pueden durar los caseros, destapándolos con moderación. Es decir, si estamos continuamente abriendo la botella lógicamente perderá fuerza y sabor ya que el alcohol se irá evaporando. Por eso es conveniente envasarlos en botellas chicas, siendo menos posible que pierda su fuerza y sabor.
Casi se podría decir que no tienen vencimiento, a lo sumo se pueden azucarar un poco, o perder su graduación alcohólica por no estar bien tapados. Para taparlos se usa corcho o tapa de rosca de metal.
Filtrado
Se cuelan y se filtran. Para filtrarlos hay que tener un poco de paciencia ya que nos llevará horas aquellos licores que son cremosos. El filtrado es necesario para quitarle todas las impurezas que tenga.
Como preparar los filtros. Primero se pasa el licor por un colador y luego se realiza el filtrado. Se pone primero una tela de algodón en el colador y sobre la tela de algodón se coloca una capa fina de algodón que cubra todo el colador.
Conviene utilizar un colador más bien grande para que caiga el líquido más fácilmente sobre un bol.
Se va agregando algo del líquido y se deja que filtre solo sin tocar ni revolver, que caiga solo. En algunos casos dura horas el filtrado. Esto dependerá de cuan espeso o cremoso sea el licor.
Otra forma de filtrar es poniendo en un colador un trozo de media de nailon de mujer, luego tela de algodón o unas gasas dobladas, más una capa fina de algodón más otro trozo de media de nylon o gasa.
Este proceso de filtrado conviene hacerlo en menguante para obtener mejores resultados
El filtrado en menguante se realiza con todos los licores.
Esta operación se puede repetir tantas veces como haga falta pero siempre en menguante para obtener un licor bien cristalino.
No importa el tiempo que haya pasado después del primer filtrado puede ser un mes o años. El resultado es el mismo.
Hay que tener en cuenta que para agilizar el filtrado cuando el licor necesita varios, es repetirlo en la semana que corresponde al menguante 2 o 3 veces o las que sea necesario.
Envasado
Conviene envasarlos en botellas chicas para no abrirla muy seguido. No deben estar a la luz. Se envasan siempre en vidrio, no en plástico.
Las botellas de plástico donde envasan alcohol tienen un tratamiento especial para ello pero de todas formas siempre es mejor el vidrio.
Cada licor tiene una cristalinidad diferente.
Frutas
Los licores de cáscara contienen aceites esenciales que los enturbian más. En esos casos conviene filtrarlos más veces.
En los de frutos secos esto no sucede tanto.
Cuando se hacen de fruta éstas deben estar maduras y en un punto óptimo, no pasadas.
Se pone primero la fruta y luego el alcohol.
Si el alcohol no cubre no importa se mezcla y una vez que pasó por el alcohol la fruta ya no se forman hongos. Esto es válido para todos los casos.
Extracto
Luego de la maceración de un licor, obtenemos el extracto.
Se guarda el extracto bien cerrado y en un lugar oscuro y se termina de preparar cuando se puede. Dura años así.
Los tiempos de maceración se deben respetar sobre todo los que llevan hojas se deben sacar en fecha o un poco antes.
Si se dejan mucho, las hojas van perdiendo color y restándole a su vez color y sabor ya que el alcohol vuelve a absorber los aromas.
Cuándo consumirlos
Los licores conviene tomarlos luego de 3 meses de preparados como mínimo.
Esta regla es válida para casi la totalidad de los licores, salvo unos pocos que una vez terminados se pueden consumir de inmediato. El estacionamiento es importante pues va suavizando el sabor del licor no sintiéndose tan fuerte el alcohol. A su vez lo hace más cristalino.
Cuando tomamos un licor recién hecho o que tiene pocos días de filtrado, notamos muy acentuado el sabor a alcohol lo que desmerece su calidad.
Cuanto más tiempo estén estacionados más ricos quedan.
Tips varios
En algunos licores si se agrega el alcohol a un almíbar caliente se puede llegar a formar un bloque de azúcar.
Los de vino licoroso quedan con una consistencia como agua.
Cual es el procedimiento correcto para lavar un envase. Primero se pone 3cm de cloro y se llena de agua.
Se deja así 3 o 4 horas, después se le pasa sal gruesa.
Y luego se lava con jabón y se termina enjuagándolos con alcohol solo.
Se pueden preparar para consumo propio, para regalar o para vender.
Las botellas, tapones y capuchón (el sombrero que lleva la botella que queda bien adherido) se compran en Droguerías o en negocios de venta de artículos de repostería.